sábado, 10 de agosto de 2013

Fría como el hielo, así era Helena.


Durante nuestro camino observe mucho a Helena. Me gustaba mirarla, y analizarla, era increíble como podía expresar su frialdad a través de unas simples palabras. No era una chica cualquiera. Supongo que a veces pensaría que yo era un estúpido y que estaba enamorado de ella. Pero sinceramente, me impresionaba, ella y su forma de pensar.
Andamos unas cuantas calles más y nos decidimos sentar en aquella heladería que hacia esquina. Era una heladería pequeña, sin una gran profundidad para recorrerla, pero digamos que era especialmente acogedora. La camarera estaba viendo un programa de la tele, yo diría que tenia pinta de ser una serie americana, de las típicas. Cuando nos vio, esbozo una gran sonrisa "Clientes" pensó. Así que vino hacia nosotros rápidamente, como una bala. Elegimos nuestros sabores preferidos, yo por supuesto no me pude resistir y escogí un delicioso cucurucho relleno de helado con kit-kat. El chocolate era mi debilidad, todo el mundo lo sabia. Helena sin embargo opto por algo totalmente distinto, un helado de vainilla la pareció lo más adecuado para la ocasión.

No me digas que no es perfecto, tomando un helado en un día soleado con una grata compañía. No podía ser mejor, James.
Nunca pensé que yo podría llegar a ser una grata compañía, Helena. De hecho pensaba que  solo querías pasar el rato conmigo.
Soy fría pero tengo mis sentimientos, aunque me cueste sacarlos. Te acabo de echar un piropo hace unos diez segundos, guárdalo con mucho valor, no creo que vuelvas a ver otro hasta dentro de unos días, y más saliendo por mi boca
Mi cara fue cambiando poco a poco, estaba totalmente sorprendido pero a la vez contento.
Maldita picardía la que tienes, Helena. Ese es tu fallo con los hombres o ¿no?
No tengo un fallo exacto con los hombres. Simplemente no sois de fiar, hasta una maquina seria capaz de controlaros y llevaros por el mal camino. Sois tan simples que incluso no os valéis por vosotros mismos.
Disculpa, creo que no es bueno generalizar. A mi no me conoces del todo, no sabes como soy aún.
Pero lo presiento, querido. Bueno, hoy he quedado contigo por algo y deberías saberlo. Quería ante todo darte las gracias por lo que hiciste ayer, fue un gran detalle. Ese cabrón me hizo bastante daño y encima me dejo tirada en la calle. Maldito infeliz de mierda.
Bueno tranquilizate, lo hice porque quise, no te iba a dejar en la calle tirada, como si de un trapo se tratara. Ademas cualquiera lo hubiera hecho, estoy seguro.
Confías demasiado en la gente, James. Eso es un gran fallo.
Todos tenemos sentimientos, por lo tanto cualquiera hubiera actuado, aunque hubiera sido por pena.
Ese es el problema, odio tener sentimientos James, lo odio. Preferiría no tener sentimientos, todo seria mucho mejor ¿no crees? Tu vives tu vida con distintas personas, cada una de ellas son especiales en un especifico momento de tu vida, pero no durante todo el recorrido. Pero no tienes la obligación de ligarte a ellas ni  a de depender de ellas. Por lo tanto si esa persona desaparece no podrías sentir dolor, y te ahorrarías el maldito sufrimiento que no nos lleva a ninguna parte. Una piedra sin sentimientos creo que vive mejor que yo, de verdad.
No podría creer lo que estaba oyendo. Y lo peor era que esa teoría era cierta, tenia su sentido y todo.
 En fin lo siento no debería haberte soltado este rollo, lo siento.
¿Por qué te disculpas por cosas innecesarias? de verdad no me importa escucharte, no soy un cualquiera, de verdad.
No puedo empezar a cogerte cariño y mucho menos confiar en ti. No, ahora no. Lo siento, me pillas muy mal moralmente. Cada vez que confías en una persona y le cuentas algo esa persona ya sabe una parte de tu vida que debe ser tuya, y yo no quiero eso. No quiero sentirme vulnerable ante nadie, para nada.
Lo triste es que tengas que fingir ser una fría sin corazón durante toda tu vida.
Me he criado así. Demasiados golpes durante toda mi vida como para seguir siendo positiva.
No te entiendo demasiado, solo quiero que sepas que estoy para ayudarte. Confía en mi, de verdad.
El tiempo es el único capaz de decidir, dame tiempo y lo veremos. De momento yo necesito otro helado, este ya se ha acabado.